A estas alturas no es novedad que una empresa comience a utilizar servicios de entrega automática para sus productos, sin embargo cada vez que una máquina reemplaza el trabajo que antes hacía un ser humano, siempre es un tema que nos preocupa y concierne. Esta vez fue el turno de los repartidores de pizza, específicamente de los pertenecientes a la cadena Domino’s, quienes fueron reemplazados por una flota de vehículos autónomos en Alemania y Holanda, informa hoy Bloomberg.
Las pruebas fueron realizadas en ciertas localidades de estos dos países, utilizando una suerte de pequeños drones terrestres creados por Starship Technologies (los mismos de la foto), los cuales usan baterías eléctricas para transportar objetos de hasta nueve kilogramos. Si lo traducimos a comida, un pedido de hasta ocho pizzas con sus respectivos bebestibles es más que suficiente. Me dio hambre de sólo escribirlo.
La medida, eso sí, no es nueva. Ya el año pasado la empresa había realizado pruebas con vehículos aéreos en Nueva Zelanda obteniendo muy buenos resultados, por lo que ya podemos prever qué va a pasar con los motociclistas en el futuro cercano. Desde ya, nuestro más sentido pésame.
A pesar de lo catastrófico que puede sonar todo lo anterior, los vehículos sólo son capaces de transportar elementos hasta cerca de un kilómetro y medio (o una milla, para ser exactos) a la redonda de dichas tiendas, por lo que posiblemente el trabajo de los chicos aún no corra tanto riesgo. Por ahora.
